Aventuras & Desventuras en Moldavia: Stefan Cel Mare, domingo por la tarde

Hace días que no escribo, bueno, ha sido por una buena causa... estaba consiguiendo mi nuevo pc!!! por fin!

Otra cosa increíble...

Como ya sabéis, soy voluntaria, y todos tenemos un seguro que nos cubre todo lo relacionado con sanidad, si tenemos que volver a casa por alguna emergencia, y si se nos rompe alguna pertenencia de valor. Bueno, pues intenté informarme por activa y por pasiva con mi Host Organizacion de los pasos a seguir para informar al seguro... y nada. Finalmente me compro el pc para poder seguir comunicándome con el mundo y, nada más y nada menos que al día siguiente de que me acompañaran a comprar la maravilla de ordenador..... me dicen que si había sido una compañera la causante del siniestro no debeía de haber ningún problema para repararlo...

QUÉEEEEEEE???????????? EN SERIO????????? NO, ME-LO-PUEDO-CREER :( Gracias por nada!!!!
Ahora mismo tengo un grandísimo cabreo!!! y mi compi una gran frustración...

Parece que la paciencia es algo a trabajar nada más bajar del avión, porque esto es solo el principio...

Ya os contaré, porque de los dos acontecimientos que están necesitando de toda mi paciencia, este es solo la punta del iceberg.

Calarasi, una de las calles camino del trabajo.
Patinando sobre las calles congeladas

Ahora os cuento la Gran Aventura que esconde Moldova en invierno, algo probablemente muy de suponer, pero para lo que yo no venia preparada jajajaja!!!

La ciudad se ha convertido en una auténtica pista de patinaje!! Todo un peligro. Yo por mi parte ya estrené el suelo en la primera nevada, en Calarasi, la ignorancia, y la confianza es lo que tiene.

Por la mañana todo precioso, feliz, el pueblo parecía una postal navideña. Dentro del poco encanto que tiene en general en inverno.... y cuando salí del trabajo...

Lo que hab'ia aun era nieve!! pero pisada, muy pisada, y se había convertido en una gran placa de hielo, y ah'i que fui yo, patinazo y costarazo contra el suelo!!! jajajajaja!! En ese momento no me reí demasiado, la verdad. Me comporté como típica española, ca...ndome en todo. Pero con mucho
cuidado, conseguí llegar a casa sin volver a caerme y, aunque dolorida, riéndome de mi primera caída.

Lo bueno de todo esto, que cuando pasé el fin de semana en Chisinau, ya estaba preparada para andar por una ciudad convertida en hielo, con todo el cuidado del mundo. Tengo que reconocer que es muy gracioso ver andando a todo el mundo como patos, yo la que más y la primera, porque también hay quien ha nacido en estas condiciones y va deslizándose por las aceras con un estilo digno de campeonato.

Antes de todo eso pude disfrutar de un paseo por la avd principal de Chisinau "Estrada Stefan Cel Mare". Un contraste de grandes edificios, semejantes a mansiones, una avenida llena de tiendas caras, de ropa, de móviles, de bombones. Y unas carreteras y autobuses dignos de los años 60, algo que todavía me causa impacto.

Os dejo unas poquitas imágenes, estoy trabajando para crear albums más completos y añadir el enlace. Ya os avisaré.